Más vale calidad que cantidad

Si eres community manager, o eres el socio de una pyme al que le toca llevar las redes sociales, conocerás de sobra el síndrome de los seguidores. Sí, esa obsesión por coleccionar seguidores a tutiplen a cuaquier precio y vengan de donde vengan. De hecho, la compra de seguidores es una práctica común por parte de muchas empresas o de personajes públicos que quieren tener decenas de miles de seguidores de golpe y porrazo y sin trabajo previo.

Una estrategia errónea que puede que dé sus frutos de cara al cliente a corto plazo, pero que es un auténtico error a medio y largo plaza, al no construir una comunidad de seguidores fieles a la marca, sino un conjunto de cuentas falsas en la mayor parte de los casos, y que pueden incluso desprestigiar a nuestra firma si llega a extenderse el rumor de que nuestros seguidores son falsos.

Pero al margen de la compra de seguidores, la obsesión por el número de usuarios es algo que se extiende entre empresas, clientes e incluso entre muchos community managers. Está claro que el número de seguidores es importante, eso nadie puede negarlo. A fin de cuentas, el número de seguidores es un indicador que nuestra cuenta es un éxito. Pero también hay que señalar que más vale calidad que cantidad, y que no todo vale  a la hora de conseguidor seguidores.

Lo importante, es que nuestros seguidores sea fieles y se conviertan en los auténticos embajadores de nuestra marca. De nada sirve tener miles de seguidores si son falsos, si no pertenecen al target al que deseamos dirigirnos y que es el cliente realmente potencial, o si nunca interactúan con nosotros. Es mejor tener fans naturales y de calidad, que nos sigan porque creen en nosotros, que fans comprados a golpe de talón o que nada tienen que ver con nosotros.

Fans creados desde la calidad de nuestros contenidos, desde el conocimiento de sus hábitos y de sus gustos, de estrategias dirigidas a alcanzar una serie de objetivos y elaboradas teniendo en cuenta que detrás de cada número hay una persona. Con el trabajo bien hecho,  y compartiendo contenido original de forma habitual, los seguidores irán llegando de forma natural, convirtiéndose en un factor clave para la difusión de tu marca.